EL
PRECIO DE UN "POR SI ACASO" |
Vicente
José Carrasco Tortosa, Pedro Samper Torres, Lucía
Climent Coronado, Beatriz Serrano Carrasco, César
Rico Beltrán |
Servicio
de Urgencias. Hospital I General. Elda. Alicante |
Desde hace bastantes años, todas las voces que se alzan desde el
ámbito sanitario, hacen hincapié en la necesidad de prevenir. En
ocasiones, se justifica con esta necesidad de prevenir males
mayores el empleo de recursos y la toma de decisiones, que a
fuerza de repetirse en el tiempo se convierten en costumbres que
los profesionales sanitarios realizamos rutinariamente sin
plantearnos si existen suficientes evidencias científicas de si
los riesgos compensan los posibles beneficios.
En nuestra medicina moderna, sólo por la necesidad de
prevenir tomamos decisiones y empleamos recursos
innecesarios que nos llevan a confundir lo básico de lo
necesario. Una vía periférica no es lo básico en un
servicio de urgencias, la pregunta que tendríamos que
hacer es, si es necesaria. La fácil prescripción y la
práctica de la “medicina defensiva”, hace que en
ocasiones el criterio para pautar el acceso venoso
periférico sea únicamente el de “por si acaso hiciera
falta”, sin detenerse a valorar más detenidamente al
paciente. Olvidando que no es un procedimiento inocuo,
que conlleva una serie de riesgos para el
paciente1,2,3,4,5,6 y para el equipo de enfermería7, y
sin pararse a pensar lo que ello conlleva de gasto
económico, recursos humanos, retraso en la atención al
resto de pacientes.
¿Deberíamos considerar la “innecesaria” canalización
venosa periférica una “costumbre correcta”?. En el caso
concreto de nuestro servicio teníamos la creencia
subjetiva de que se canalizaban un alto número de
accesos periféricos innecesarios, y consultando la
bibliografía, creímos que la media era superior al de
los estudios encontrados, por eso creímos conveniente la
realización de este estudio8.9,10,11,12
El estudio lo realizamos en el Hospital General de Elda
( Alicante ) siendo de referencia en el
Departamento de Salud 18 con una población estimada en
300.000 habitantes. Posee 300 camas, unas puertas de
urgencias comunes tanto para adultos como para
pediatría, sin R.A.C. Un box de críticos, dos boxes de
reconocimiento rápido, cuatro boxes de encamados, uno de
pediatría y uno de trauma, además, vinculadas al
servicio existen dos salas de observación con capacidad
para 19 camas.
1.- En el
servicio de Urgencia del Hospital de Elda se realiza un elevado
número de canalizaciones de vías venosas innecesarias.
GENERAL:
Evidenciar la adecuación de vías periféricas canalizadas
en el Servicio de Urgencias del Hospital de Elda.
ESPECIFICOS:
1.-
Relacionar vías canalizadas según el motivo asistencial
de urgencias.
2.- Comparar los resultados con la bibliografía
existente.
3.- Cuantificar los costes materiales y personales de
las vías periféricas innecesarias.
4.- Conocer porcentaje vías venosas útiles o adecuadas
en nuestro servicio.
5.- Valorar si es necesaria la existencia de Parámetros
o Criterios a la hora de decidir la canalización de una
vía periférica.
Realizamos un estudio descriptivo analítico retrospectivo,
basado en la revisión sistemática de las hojas de registro de
enfermería recogidas durante los meses de Octubre, Noviembre y
Diciembre del año 2004, los archivadores que las contenían se
eligieron al azar. Estas hojas de registro, son una hoja
autocopiativa que se separa y archiva en el momento que el
paciente abandona la unidad, (alta, ingreso, traslado o exitus).
Este tipo de registro nos brindo la posibilidad de superar los
problemas encontrados en periodos anteriores en los que los
registros de puerta se mandaban a archivos generales en donde
demoraban por un periodo aproximado de un año su archivo en las
respectivas historias.
Los criterios de exclusión fueron que la vía no se
canalizase en el propio servicio de urgencias, es decir
que se tratase de un paciente derivado de otro centro o
una vía canalizada por el SAMU, que el paciente no fuese
pediátrico ni que tuviese una patología
musculoesquelética.
Definimos vías venosas necesarias a aquellas que fueron
utilizadas para la administración de al menos una dosis
de medicación en las puertas de urgencias8,9,10, o para
la perfusión sueros con un volumen superior a 1500 ml.
Por tratarse de un estudio retrospectivo no quisimos
entrar en la polémica de cuestionar si el fármaco
administrado por la vía intravenosa podría haber sido
administrado por alguna otra vía 11, en cambio
entendemos que administrar un volumen inferior a 1500 ml
no justifica la vía venosa para la rehidratación, ya que
en este caso es la vía oral la mejor para este objetivo.
Un asunto no exento de controversia, fue cómo considerar
los casos en los que se supone que la vía fuera a ser
utilizada en otra unidad, finalmente se decidió por
consenso que en todas las unidades al las pudiera ser
remitido el paciente tenía su propia dotación de
enfermeras que tendrían que canalizar la vía en el caso
que lo considerasen adecuado. Incluimos en este apartado
también los pacientes que pasaron a observación.
El método empleado para calcular el coste de
canalización de una vía periférica, fue el resultado del
cálculo del coste del tiempo de enfermería (12 minutos)
10 mas el coste del material que nos dio el servicio de
suministros 1.24€, la suma total nos dio 4.49€. El
precio de la facturación lo extrajimos de las tasas de
la Generalitat Valenciana 14 74.52€.
Nos centramos en el estudio de los registros de la
población adulta debido a que la atención en pediatría y
en enfermedades músculo esqueléticas posee
características específicas suficientes como para
realizar un estudio independiente.
De los registros revisados, recogimos los datos del
paciente de: número de historia o de registro.
Igualmente de la atención prestada recogimos los datos
de si se canalizó o no una vía venosa, si se administró
o no medicación intravenosa, si el volumen de líquidos
perfundidos fue superior o inferior a 1500 ml., si
ingresó en planta y la patología que le fue
diagnosticada.
Agrupamos las patologías en los siguientes grupos
terapéuticos: respiratorios, cardiovasculares,
hematológicos, neurológicos, abdominales, nefro-urológicos,
metabólicos, otorrinolaringológicos oftalmológicos,
psiquiátricos, desconocidos y otros. En el apartados
desconocidos, incluimos los casos en los que no figuraba
el diagnóstico o era inteligible. El apartado otros, lo
configuraban signos y síntomas sin cabida en otra
categoría.
Los datos obtenidos, fueron recogidos en una plantilla
diseñada ad hoc. Tanto las personas que hicieron el
trabajo de campo, como quien los tabuló pasaron un
periodo de prueba de recogida conjunta en el que
unificaron y consensuaron los criterios para su
realización.
Se utilizó el programa SPSS para el análisis estadístico
de los datos obtenidos.
ANÁLISIS
DE LOS RESULTADOS |
Tras la recogida y tabulación de los datos, nos
centramos en contrastar la posible veracidad de
la hipótesis planteada en nuestro estudio. Para
ello analizamos los datos basándonos
principalmente en las variables que más se
acercaban al planteamiento de la hipótesis, como
son la canalización de una vía periférica, la
administración de tratamiento intravenoso y la
patología por la que se acude a nuestro servicio
de urgencias hospitalario.
La
totalidad de las patologías que abarca el estudio
comprende una muestra de 1986 pacientes, es decir, el
12,7% de los 15675 pacientes que acudieron a urgencias
durante el período del estudio sin ninguna exclusión.
Acercándonos al perfil del paciente que acude a nuestro
Servicio de Urgencias, podríamos decir que es
frecuentador, ya que el 69% tienen Historia Clínica,
casi en la mitad de los casos se le canaliza vía
periférica (48%), a uno de cada 3 se le administra
tratamiento intravenoso (30%), y uno de cada 5 acaba
ingresando en planta (18%), sin homogeneidad en la
patología consultada pero predominando la patología
abdominal, otros signos y síntomas, neurológica,
respiratoria y cardiológica en este orden. (Gráficas 1,
2, 3,4 y5 y Tabla 2).
Patología |
Frecuencia |
Porcentaje |
Abdominal |
476 |
24 |
Cardiológica |
219 |
11 |
Desconocida |
75 |
4 |
Hematológica |
30 |
2 |
Metabólica |
17 |
1 |
NefroUrológica |
162 |
8 |
Neurológica |
250 |
13 |
OFT |
47 |
2 |
ORL |
69 |
3 |
Otras |
298 |
15 |
Psiquiátrica |
103 |
5 |
Respiratoria |
240 |
12 |
Para poder encontrar los datos que dieran fiabilidad a
nuestra hipótesis, los analizamos estadísticamente
usando tablas de contingencia, y obtenemos los
siguientes resultados:
1. Se
demuestra que canalizar vía periférica no significa
usarla, ya que el 37% de las vías canalizadas no se han
usado en el Servicio de Urgencias. (Gráfica 6)
2. La relación entre llevar
vía periférica e ingresar se acepta sólo como temor del
paciente, pero no como prioridad de ingreso justificada,
ya que el 68% de los pacientes con vía periférica NO
ingresa en planta, y además hay un 4% de pacientes a los
que no se les ha canalizado la vía periférica y acaba
ingresando (Gráfica 7).
3. Se hace un uso muy remoto
de la vía periférica para rehidratar al paciente con una
cantidad de fluidos mayor de 1500cc, ya que fueron sólo
5 pacientes (0,25%) del total de la muestra los que
llevaron esta cantidad mínima de fluidos. Si
escogiésemos como muestra sólo al grupo de pacientes que
llevan tratamiento intravenoso, las cosas no cambian
mucho ya que serían 4 los pacientes con más de 1500cc de
fluidos administrados (0,7%).
4. El ingreso no siempre va
precedido de una administración de medicación
intravenosa en Urgencias, ya que el 12% de los que no
han llevado tratamiento intravenoso acaban ingresando en
planta. Desde la otra perspectiva, el 71% de los
pacientes con tratamiento intravenoso en Urgencias NO
ingresan, y ello justificaría con creces la primera
afirmación de este punto (Gráfica 8).
5. Tras plantearnos la
posibilidad de que determinadas patologías tuviesen más
justificada la canalización de vía periférica,
realizamos una tabla de contingencia con 3 variables, 2
de ellas dependientes (canalización de vía periférica y
administración de tratamiento intravenoso) y una
independiente (tipo de patología). Obtuvimos los
siguientes resultados, por orden descendente, referentes
a las vías periféricas NO válidas (Tabla 1):
1º-
Oftalmológicas (67%)
2º- Psiquiátricas (53%)
3º- Neurológicas (50%)
4º- Cardiológicas (48%)
5º- ORL (45%)
6º- Metabólicas (43%)
7º- Otros signos y síntomas (38%)
8º- Hematológicas (38%)
9º- Desconocidas (36%)
10º- Abdominales (32%)
11º- Respiratorias (28%)
12º- Nefrourológicas (24%)
1.-
El porcentaje de vías periféricas no adecuadas
en nuestro estudio es similar a la mayoría de
estudios consultados, a pesar de que éstos
tenían criterios de validación más amplios.
Destaca que en un estudio del Hospital Morales
Meseguer de Murcia la NO adecuación de las vías
era muy inferior al resto.13
2.- Las
vías periféricas más adecuadas se canalizaron en
pacientes con patologías nefrourológicas y respiratorias
y las más inadecuadas en pacientes con patologías
oftalmológicas y psiquiátricas.
3.- La no
existencia de unos parámetros para adecuar la
canalización de vías periféricas en urgencias supone un
coste mínimo anual de 50477 € y máximo de 837753 €.
|
Pacientes |
Total vías |
Vías no
útiles |
Coste/Facturación (€ por unidad) |
Ahorro por
coste/ Facturación (en €) |
Muestra |
1986 |
956 |
352 |
4,49 /74,52 |
1580 / 26231 |
Población
año |
63118 |
30385 |
11242 |
4,49 /74,52 |
50477 /
837753 |
1.-
Gemma Marín Vivo, Emilia Mateo Marín.”Catéteres
venosos de acceso periférico”. Rol de Enfermería
sep.1997 229 Pág. 67 – 72.
2.- Mª
Pilar Córcoles Jiménez, Teresa Ruiz Gómez, Damián García
Olmo.”Flebitis postpunción”. Rol de Enfermería sep 1996
217 Pág.13-16.
3.- F.J
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Cano, A. Julián Jiménez. Técnicas invasivas en
urgencias. In: Manual de protocolos y actuación en
urgencias. Editor A. Julián Jiménez. 2º edición 2004
ISBN. 84-688-9452-4.
4.- José
Ramón Toral Revuelta. Sepsis, fiebre prolongada e
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infecciosas – SEMI.grupo de trabajo en enfermedades
infecciosas.
5.-
Antonio Chucillas Fernández, Natividad Sánchez González,
Maria Dolores Sánchez Corco loes.”Plan de cuidados para
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6.-
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8.- M.C.
Prieto Muñoz, M.P. García Muñoz, T. Pretejo Rodríguez,
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urgencias y emergencias. Nº19 Febrero 2004 ISBN
1579-5527
9.- Mª
Teresa Arias Miranda, Reyes García de Diego Et Al.
“Estudio sobre la adecuación de las vías venosas en el
servicio de urgencias del hospital de Jove”.
Ciberrevista de enfermería de urgencias y emergencias.
ISBN 1579-5527
10.-
Nieto Galeano J., Moreno Cano S., Vicente Paños E.,
Fernández Bejarano J.A., García Moreno A., Rodríguez
Almodóvar A.I., Sánchez Fernández T., Serrano Amores L.,
García Alcalde M.G. “Canalización de vías periféricas en
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11.- Luis
Velasco Díaz, Bernabé Fernández González, Susana García
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12.-
Morata Huerta C., Lillo Tejada P.”Utilización de vías
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urgencias Nº 14, Agosto 2003 ISBN 1579-5527
13.- P.
Bosque Lorente, E. Hernández Pérez, J. A. Martínez
García, F.C. Sánchez Sánchez.” Adecuación de las vías
venosas periféricas en el servicio de urgencias del
Morales Meseguer”. Ciberrevista de enfermería de
urgencias Nº 36 , Noviembre 2005 ISBN 1579-5527.
14.- DOGV
Nº 4971 del 22 de Marzo de 2005 |